jueves, 12 de marzo de 2015

La prevención de riesgos laborales como práctica profesional interdisciplinar

El corporativismo de antaño (el de las leyes inmutables ante los cambios sociales) sigue haciendo daño a las profesiones emergentes (es un decir…en algunos casos, son profesiones que proceden de titulaciones con más de 50 años de existencia), y por ende, debilita uno de los motores económicos de nuestra sociedad.  Hace falta masa crítica para crear estados de opinión favorables a combatir este anacronismo, donde se involucren no sólo los Colegios de las titulaciones perjudicadas, sino la propia Universidad (tienen la responsabilidad de formar a los futuros profesionales, sea cual sea su campo laboral), agentes sociales, asociaciones sectoriales, ciudadanos, etc.   De hecho, la troika (Comisión Europea, FMI y World Bank)  a propósito de la futura Ley de Colegios y Servicios Profesionales, hace una llamada de atención a las autoridades españolas por la nimia liberalización y la escasa eliminación de barreras de entrada de profesiones, especialmente en el sector sanitario, que concentra un 37,6% de las profesiones reguladas en España. Pero en esta ocasión, no trataremos el proyecto de Ley, sino que nos adentraremos en el mundo de la prevención de riesgos laborales, para denunciar los intentos de algunos en monopolizar este campo profesional, que por definición es interdisciplinar, lo que lo aleja de cualquier pretensión capitalizadora por parte de determinados sectores profesionales y académicos.
El ejercicio profesional en prevención de riesgos laborales requiere del análisis de una realidad compleja mediante la interacción de diversas disciplinas, integrando métodos y conocimiento desde diferentes perspectivas, para la resolución práctica de los problemas en el mundo laboral. El objetivo de la protección de la salud de los trabajadores no puede entenderse sin el trabajo cooperativo de los profesionales de la prevención procedentes de todos los sectores académicos, atendiendo a la pluralidad de funciones que caracteriza a estos puestos de trabajo, y sin que deba exigirse una concreta titulación universitaria, como la Ingeniería (¡¡da lo mismo la especialidad y el itinerario curricular¡¡), con exclusión de las restantes…. Sigue leyendo aquí.